Seguramente alguna vez te ha pasado que terminas de cocinar y por flojera o falta de tiempo olvidas limpiar las paredes. Esto con el tiempo puede crear una capa muy poco visible de grasa, la cual puede volverse amarilla y en el peor de los casos, sarro en la cocina.

Si deseas evitar que suceda esto o quieres limpiar las paredes de tu cocina de forma correcta, tenemos un tip perfecto para ti.

En un recipiente coloca una buena cantidad de bicarbonato, media taza de agua, jugo de un limón y un par de gotitas de vinagre. Lo que buscamos es que se forme una pasta, por lo que la cantidad de bicarbonato será mayor.
Cuando formes la mezcla correctamente, colócala sobre la pared y las áreas con más grasa. Déjala reposar por 30 minutos y posteriormente con ayuda de Fibra Jabonosa comienza a tallar para remover la grasa pegada. Por último, enjuaga con abundante agua y deja secar, tu pared quedará reluciente.

Este método lo puedes llevar a cabo una vez por semana para evitar que la grasa se acumule y sea más difícil quitarla.